Si tendríamos que nombrar a algún personaje bíblico que han tenido que sufrir grandes tragedias, no podríamos dejar de pensar en Job. En los dos primeros capítulos su vida cambió dramáticamente; de ser un acaudalado hombre de negocios y el padre ejemplar de una numerosa familia, a quedar pobre, solo y enfermo.adversidades
Los siguientes capítulos nos hablan de la lucha que él tiene para comprender las razones por la que pasaron todas esas desgracias. Sólo imaginemos un momento: perdió todos sus bienes, toda su familia y su salud. Algunos de sus amigos se acercaron creyendo que tenían las razones correctas por las que había sufrido todas esas pérdidas. Ellos creían que él tenía algún pecado no confesado.
Job, al revisar su vida, no logró encontrar ninguno sin confesar.
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